Más ideas sueltas
Como pueden notar, hermanos todos, no dejo de compartir diversas ideas creativas contemplativas que de aplicarse podrían hacer un gran bien a Puerto Rico y a Estados Unidos, resplandeciendo juntos como Patria Viva —ese es el nombre de la fundación que soy llamada a fundar para promover juntos todo tipo de iniciativas, como la Escuela de Cultura Puertorriqueña Goeiz, que sirvan al bien común de toda la sociedad, a la usanza de un movimiento social que también es movimiento profético—… pero hay algo que creo que me corresponde decir en estos momentos de forma muy clara.
Para generar un cambio que transforme a Puerto Rico no basta meramente con dar ayudas. Puede resultar curioso que esta servidora sea la que diga algo así, considerando lo mucho que repito constantemente el verbo ayudar: ayudar a ser, ayudar a hacer, ayudar a crecer, ayudar a irradiar… Sin embargo, entre los principios de ética social que forman parte del modelo de formación personal integractivo, al hablar de la dimensión filial de la naturaleza de la formación personal, hay un principio, uno de los siete, muy, muy, muy importante: jamás se ha de hacer algo que la persona pueda hacer por sí misma. En estos momentos no recuerdo el nombre concreto de este principio filial de la naturaleza de la formación personal, pero es un principio sumamente importante. Hablando en arroz y habichuelas: al hablar de ayudar NUNCA se ha de pretender ayudar de tal forma que al ayudar a una persona se haga algo que la persona puede y debe hacer por sí misma. Esa es la forma correcta de ayudar, ayudando tomando en cuenta los principios de ética social.
Por supuesto, este principio de ética social ha de aplicarse al aplicar todas estas ideas creativas y contemplativas que comparto como posibles iniciativas para cambiar a Puerto Rico. Esto quiere decir que al realizar cualquiera de las iniciativas sociales que he propuesto —en este mismo blog post y también en otros— JAMAS se ha de llevar adelante una iniciativa cuyo ayudar haga algo que las personas puedan hacer en sí mismas. En ese caso, la ayuda ha de consistir en ayudar a las personas a aprender a hacer las cosas por sí mismas, no a hacerlo por la persona misma.
¿Por qué digo esto? Porque realmente ninguna de las ideas creativas contemplativas que he compartido y que estoy compartiendo para ayudar a los residentes de Puerto Rico a resplandecer como la Isla Luz que somos llamados a ser puede sustituir el hecho de que en Puerto Rico hay profundos problemas de estructura social, por así decirlo, que tienen que ser resueltos por las autoridades competentes para hacer posible que los puertorriqueños puedan hacer lo que les corresponde hacer por sí mismos. Podría parecer que hablo del problema de status, pero no, me refiero a un problema social derivado, en el fondo, de la crisis de inequidad que genera el colonialismo puertorriqueño. ¿A qué me refiero con esto? Me refiero a que no importa cuantas ayudas se brinden por fundaciones sin fines de lucro —no importa cuantos teachers grants, community grants, growth grants, ayudas de centros de desarrollo social, ayudas de centros de desarrollo integral para brindar servicios de salud mental, entre otras ideas contemplativas creativas que he propuesto a lo largo del tiempo como posibles iniciativas de Patria Viva cuando se funde— nada, absolutamente nada, erradica el problema raíz de los problemas sociales en Puerto Rico: el hecho de que en Puerto Rico hay un problema crónico de dependencia de ayudas de gobierno debido a la falta de empleos dignos. El problema de falta de empleo en Puerto Rico no es solo que no haya empleo para todos, ni siquiera para la mayoría: también es el hecho de que los empleos que sí hay son la inmensa mayoría infra-pagados, con un salario que no permite una vida familiar digna o que los jóvenes puedan independizarse por sí mismos. En Puerto Rico muchas veces es más rentable vivir como incapacitado que vivir como trabajador digno, así de mal pagos son la mayoría de los empleos disponibles. No solamente eso: muchas veces personas totalmente aptas para trabajar y que desean trabajar son forzadas a vivir como ciudadanos incapacitados funcionalmente al no tener otra opción para sobrevivir que recibir ayudas gubernamentales. La realidad es que a la inmensa mayoría de los puertorriqueños se le niega la dignidad suprema de ganarse su sustento con el sudor de su frente, y además de eso, los que sí pueden ganarse parte o todo su sustento con el sudor de su frente, lo hacen de tal forma que también es un atropello rampante a su dignidad, de tal forma que no tienen más opción que vivir para trabajar y así poder pagar todas las cuentas básicas que conlleva tener una familia modesta en un lugar como Puerto Rico, donde el costo de vida es tan elevado.
He conocido muy de cerca las dos situaciones que acabo de describir. He sabido lo que es ser forzada a vivir como incapacitada funcional —de hecho, entre los stickers que se han usado a mi alrededor como forma de explotación social es sticker de personas impedidas—, sin que se me brinde la oportunidad de vivir y trabajar dignamente. No lo digo solo por el abuso que ha sucedido a mi alrededor de tal forma que se me ha incapacitado social y profesionalmente, lo digo también por el hecho de que teniendo una certificación como maestra de inglés elemental, una de las profesiones más demandadas en estos momentos en Puerto Rico, ya llevo dos años sin poder trabajar, ya sea porque no había ofertas de empleo disponibles o porque la explotación social llegó a tal extremo que me hicieron absolutamente imposible solicitar a un puesto, aunque hubiera vacantes. El año pasado sucedió lo primero; en estos momentos está sucediendo lo segundo. Este año no tengo disponibles mis documentos profesionales indispensables, ni computadora, ni siquiera teléfono o internet propios, para solicitar un empleo, aunque hay vacantes. El año pasado, aunque tenía toda la documentación, teléfono e internet, aunque hice las gestiones via internet para buscar vacantes para maestra de inglés, nunca encontré una. Es decir: durante más de dos años se me ha forzado a vivir como incapacitada funcional, viviendo de ayudas del Gobierno, cuando me fueron dadas —en determinado momento, teniendo derecho al desempleo, sencillamente hicieron imposible que lo solicitara—estando totalmente capacitada para trabajar y para ganarme el sustento por mí misma…
Sin embargo, al tener la única oportunidad que tuve para trabajar como maestra de inglés trabajé en circunstancias tales que realmente era un total atropello a mi dignidad. No me refiero solo al hecho de que se me pagó por debajo de lo que necesitaba para poder vivir dignamente —se me prometió por contrato un salario de 1500, pero la realidad fue otra: hubo meses en los que apenas se me pagó la mitad de esa cantidad, contando además los gastos de comida, de gasolina y desplazamiento hacia el trabajo, y de los materiales didácticos que yo misma tenía que comprar… lo que básicamente significaba que vivía de cheque a cheque— sino que también me refiero al hecho de que fui testigo de un maltrato institucional rampante y de un ambiente laboral literalmente tóxico que no había forma de denunciar, ni al Departamento de Educación ni a OSHA.
Con todo esto quiero decir que he conocido tanto lo que significa el ser forzada a vivir de de ayudas del gobierno estando totalmente capacitada para ganarme el sustento por mi propia cuenta, siendo forzada a vivir como incapacitada funcional debido a la esclavitud social en la que se me forzó a vivir por quienes me torturaban —y también por las autoridades que permitieron dicha situación adrede— y también conozco lo que es tener un trabajo, pero tenerlo de tal forma que sencillamente el trabajar se vuelve un absoluto atropello a la dignidad.
Ambas circunstancias son muy comunes en Puerto Rico. No soy la única que las ha vivido, aunque por los crímenes de odio y violaciones de derechos humanos que se cometieran a mi alrededor, sí que puede decirse que mis circunstancias fueran más extremas.
Voy a dar otro gran ejemplo de trabajo indigno en Puerto Rico, uno que es indignantemente común: los maestros.
Para ser maestro en Puerto Rico hay que tener, habitualmente, un bachillerato y una certificación de maestros. Es decir: hay que estudiar al menos cuatro años a tiempo completo para ser maestro, más pasar un examen de certificación. En mi caso, certificarme como maestra conllevó dos años y medio adicionales de estudios a tiempo completo, como si estuviera haciendo un segundo bachillerato en educación, pero sin que se me concediera el grado.
Un maestro en Puerto Rico estudia todo ese tiempo, con todos los gastos que conlleva el emprender esos estudios, para que una vez se le contrate como maestro, si es que tiene la suerte de ser contratado por el Departamento de Educación, gane 23,000 dólares anuales. Sí, 23,000 dólares anuales… sin aportación alguna al seguro social. A esa cantidad hay que restarle todo lo que los mismos maestros tienen que poner de su bolsillo para materiales didácticos —sin que haya exención contributiva alguna que cubra realmente ese gasto— y los gastos de desplazamiento al lugar de trabajo, más los gastos de almuerzo —que yo sepa, a los maestros no se les incluye en los almuerzos gratuitos que se les da a los estudiantes en las escuelas públicas—. Estas circunstancias se refieren a las circunstancias habituales de un maestro de escuela pública. En el caso de los estudiantes de escuelas privadas, la situación es incluso más grave: suelen ganar básicamente el salario mínimo, como le pasó a esta servidora en la escuela privada que trabajó. Literalmente un empleado de McDonalds o cualquier otro restaurante de comida rápida, o cualquier empleado de Walmart, a tiempo completo ganaba más que esta servidora. Esa es la gravísima situación de los maestros en Puerto Rico, que se están machando a trabajar en Estados Unidos, donde habitualmente ganan el doble, a raudales.
Hablemos claro: 23,000 dólares es un salario de miseria para un maestro, sobre todo considerando todos los años de preparación que necesita un maestro, lo que significa que el maestro probablemente también estará pagando préstamos estudiantiles. El hecho de que no se aporte al seguro social sencillamente agrava más la situación.
No importa que Patria Viva dé teachers grants o classroom grants para promover que los maestros emprendan en sus salones de clase sus propios proyectos creativos que aporten a una mejor sociedad puertorriqueña. Quiero decir: en Puerto Rico la situación de estrechez económica es tan y tan precaria que rarísima vez los maestros tienen la oportunidad de emprender proyectos creativos con envergadura social en sus salones de clase, para eso hay que conceder grants… pero no importa que Patria Viva conceda ese tipo de grants, como planifico que sea posible, si no se resuelve el hecho de que los maestros están extremadamente mal pagos, no se va a resolver el problema social raíz tras la crisis de los maestros de Puerto Rico.
Lo mismo aplica, por ejemplo, a la idea contemplativa creativa que propongo más abajo en este mismo blog post, la idea de abrir centros de desarrollo integral que den servicios de salud mental integral a personas necesitadas de servicios de salud mental gratuitos o de costo reducido que resuelva los graves problemas de salud menta que hay en Puerto Rico, por supuesto también entre maestros. Quiero decir: no importa que se le den servicios de salud mental gratuitos a un maestro, si no se resuelve la raíz de su crisis de salud mental, que es el hecho de que tenga que trabajar casi como esclavo, con un sueldo de miseria que no da para las necesidades más básicas para vivir dignamente como familia, añadiendo además la falta de oportunidades de crecimiento profesional habituales entre los maestros de Puerto Rico y la falta crónica de recursos didácticos… la terapia psicológica no resolveré absolutamente nada. No importa cuantas terapias psicológicas reciba un maestro, si no se resuelve el hecho de que está trabajando en unas circunstancias laborales indignas y con un salario de miseria que le obliga a vivir cheque a cheque, mes a mes, con el estrés que eso conlleva… la terapia psicológica no resolverá absolutamente nada.
Hablo de la profesión de maestro porque pienso que es la profesión en la que más extrema es la situación que acabo de describir… pero es una situación que se repite una y otra vez en Puerto Rico: o no tienes la oportunidad de trabajar porque no encuentras empleo, o si tienes la oportunidad, te vez forzado a trabajar en una situación absolutamente indigna, como le sucede a los maestros, tanto del sistema público como del privado. También hay otra opción, una que han tomado literalmente millones de Puerto Rico: emigrar a Estados Unidos, donde el sueldo en prácticamente todas las profesiones es el doble. En algunas, como abogados, es casi el triple. Esta es la cruda realidad: ante la inacción ante la falta de trabajo digno en Puerto Rico, millones de puertorriqueños, especialmente maestros, han tenido que emigrar.
Además, experiencias como las que yo tuve como maestra voluntaria de arte, en la cual comencé a desarrollar el proyecto creativo que hoy se conoce como Jesús Caridad, son absolutamente desconocidas para la inmensa mayoría de los maestros puertorriqueños. No solo son extremadamente mal pagos, tampoco se le dan oportunidades de crecimiento profesional y de llevar a cabo proyectos creativos con sus estudiantes, porque sencillamente no hay fondos para absolutamente nada. Si a eso se le suma el hecho de que los mismos estudiantes están desanimados y faltos de interés en aprender —el tema de la necesidad de una reforma educativa que haga posible estilos de enseñanza que resulten atrayentes a los estudiantes y accesibles a los educadores es tan profundo que amerita un blog post aparte—, teniendo los maestros que tolerar todo tipo de faltas de respeto y de malacrianzas, e incluso agresiones físicas y verbales, no cabe duda en afirmar que la profesión de maestro es en estos momentos el trabajo más indigno de Puerto Rico, lo que es tremendamente lamentable. En un pueblo donde no se valoran sus maestros hay un grave problema social.
¿En qué se gastan los millones de fondos federales que se supone que se reciban para evitar esto? No tengo la menor idea. ¿Se paga a estudiantes puertorriqueños menos dinero que los estudiantes de Estados Unidos continental, donde se ostentan flamantes escuelas públicas, en comparación a las escuelas públicas puertorriqueñas? De ese dato tampoco tengo conocimiento, ni tengo internet en estos momentos para buscarlo. De ser así es una gravísima inequidad estructural promovida por el mismísimo gobierno federal: nada, absolutamente nada, justifica que se den menos fondos federales a un estudiante sencillamente por vivir en Puerto Rico, como si los estudiantes puertorriqueños tuvieran menos dignidad.
Creo que ya se entiende un poco mejor lo que quiero decir al hablar del principio ético que dice que nunca se ha de hacer por una persona lo que puede hacer por sí misma: si un maestro debe tener los fondos para poder pagarse sus propios servicios de terapia psicológica de necesitarlos, no se debe solo fomentar centros de desarrollo integral que resuelvan la crisis a corto plazo, hay que promover la erradicación del problema raíz, que es el salario de miseria que gana un maestro… y de la misma forma que le pasa a los maestros, se repite una y otra vez en todo tipo de profesiones.
Con esto algo queda claro: no importa cuantas fundaciones sin fines de lucro existan en Puerto Rico para ayudar de una forma u otra, si no se resuelve el problema raíz de la crisis social puertorriqueña, sencillamente se está generando una dependencia indigna a servicios del gobierno y a servicios gratuitos, dependencia que no existiría si hubiera empleos dignos para tener una vida digna en Puerto Rico, sin necesidad de mudarse a Estados Unidos para poder recibir un salario digno y una aportación digna al seguro social, tal cual sucede a los maestros.
No solamente hablo desde mi experiencia personal como persona que ha sido forzada a vivir como desempleada cuando pudo perfectamente haber tenido un empleo si no hubiera forzada por las circunstancias a no trabajar y a vivir de ayudas. Hablo desde la experiencia de todos los hermanos puertorriqueños desempleados y empleados con salarios malpagos: en Puerto Rico el problema social raíz del resto de problemas sociales es la falta de empleo digno. Se ha forzado durante décadas a todo un pueblo a vivir dependiendo de ayudas gubernamentales para poder sobrevivir por falta de empleo digno, ya fuera por desempleo o por tener un empleo, pero tan extremadamente mal pago que se viola la dignidad del trabajador y se fuerza al empleado a depender también de ayudas del gobierno o de fundaciones sin fines de lucro, incluso teniendo un empleo.
Es absolutamente urgente cambiar esta realidad social en Puerto Rico. Es absolutamente necesario facilitar la creación de empleos dignos que hagan posible que todos los puertorriqueños se sostengan a sí mismos dignamente, sin tener que depender necesariamente de ayudas del gobierno o de ayudas de fundaciones sin fines de lucro para vivir con un mínimo de dignidad.
Creo que podemos decir que todos los sectores sociales de Puerto Rico están de acuerdo en que en estos momentos hay un serio problema de salud mental en Puerto Rico. Se aluden a variedad de causas para explicar esta crisis, entre ellas el hecho de que los servicios de salud mental que sirven al plan Vital —el plan de salud en la que está suscrita la población más vulnerable de Puerto Rico— no dan abasto para las necesidades de esa población. Esta servidora se atreve a ir más allá: la raíz de esta crisis de salud mental en Puerto Rico se debe a la falta de empleo digno. El ocio malsano que conlleva el no tener empleo, la falta de tiempo de ocio saludable y vacaciones que conlleva un empleo malpago que no da espacio para otra cosa que no sea pagar cuentas, los diversos problemas de salud mental derivados de la falta de recursos para vivir una vida con un propósito de auténtico crecimiento personal, un propósito que no se trate de vivir para pagar cuentas mes a mes… son el caldo de cultivo perfecto para crear una crisis social de salud mental. Si a eso se le añade la circunstancia de desastres naturales mayores, como el huracán María, un terremoto y una pandemia… no puede extrañar la magnitud de la crisis de salud mental que está asolando a Puerto Rico en estos momentos, especialmente entre la población más vulnerable. No habrá ayuda que se brinde que resuelva el problema raíz: la falta de empleo digno que haga posible vivir una vida digna que no cause enfermedades de salud mental. De hecho, en la última hospitalización psiquiátrica forzada de esta servidora, una de las cosas que me preguntó el doctor que me hospitalizó a la fuerza (el Dr. William Lugo-Sanchez) en el hospital Panamericano fue porque no tenía un empleo para no tener que vivir en casa de mis progenitores. Fue una situación tremendamente injusta, porque por la naturaleza de la explotación social a la que se me ha expuesto se me hace imposible buscar empleo, pero es un ejemplo de como el criterio de falta de empleo se toma en cuenta —al menos en teoría— en los servicios de salud mental en la isla. La raíz más profunda, insisto, de la crisis de salud mental que asola la isla es la falta de empleo digno.
Por supuesto, la crisis de salud mental no es el único mal social que viene de la falta de empleo digno. Criminalidad, narcotráfico, chanchullería —afán de tumbar todo el dinero que se pueda, especialmente del gobierno—, incluso determinados casos de violencia social, de maltrato infantil y de violencia de género, son algunas de las otras consecuencias de la falta de empleo digno… pero ninguna otra consecuencia es tan cruda como la imposibilidad de formar y sostener una familia dignamente por falta de empleo digno.
¿Cómo atajar la crisis de falta de empleo digno en Puerto Rico?
Aquí van las propuestas de esta servidora, a corto plazo (medidas para aplicarse cuanto antes), a medio plazo (medidas para aplicarse en un plazo entre 1 a 2 años) y a largo plazo (medidas a aplicarse en un plazo de 5 años). Algunas de las medidas que verán en esta lista las verán también en la lista de ideas creativas contemplativas más abajo en el blog post.
Medidas a corto plazo (medidas para aplicarse cuanto antes) para atajar el problema de falta de empleo digno en Puerto Rico.
-Iniciar una reforma laboral: esta es la primera medida que es necesaria, la más elemental. De hecho, está en la agenda gubernamental en estos momentos. Se debe llevar adelante escalonadamente, comenzando cuanto antes. Es absolutamente inaceptable que lo que gana un trabajador por hora sea básicamente el costo de un galón de leche. Los salarios de los trabajadores puertorriqueños tienen que aumentar. Es imposible sostener a una familia dignamente con un salario de 7.25 la hora. Sencillamente es imposible. El estrés y los conflictos sociales que genera una situación como esta —en estos momentos es más rentable vivir de ayudas del gobierno que trabajar, e incluso trabajando es necesario recibir ayudas del gobierno para poder vivir con un mínimo de dignidad— es absolutamente inadmisible. Sencillamente inadmisible. Además de esto, el costo de vida sigue subiendo en espiral. Es una situación intolerable, especialmente en profesiones que ya están extremadamente mal pagas, como la de maestro. Se tiene que subir el salario a un salario mínimo justo, que haga posible que como mínimo se pueda sostener una familia modesta dignamente, sin depender de ayudas federales en la mayoría de los casos. Se tienen que hacer medidas que fomenten la integración en la fuerza laboral de quienes estando aptos para trabajar optan por vivir de ayudas federales. Se tienen que hacer medidas que fomenten una sana integración de vida laboral y vida familiar. En definitiva, se tiene que fomentar una reforma laboral que haga posible que en Puerto Rico haya empleos dignos, empleos con salarios con los que se pueda vivir dignamente y honradamente, sin chanchullerías como las que se vieron con las ayudas de desempleo que se concedieron en la pandemia, donde la mayoría de personas que intentaron cometer fraude con los fondos de desempleo fueron… empleados del mismo gobierno. No estoy justificando ningún acto delictivo o de fraude, pero eso es una clara señal de que en primer lugar es el gobierno el que no está pagando salarios dignos y creando empleos dignos. Es el gobierno quien en primer lugar tiene que dar cátedra haciendo posible que sus propios empleados tengan un empleo con el que se pueda sostener a una familia con dignidad, sin recurrir a chanchullerías como intentar cometer fraude al desempleo. Al decir “empleo digno” no solo me refiero a un empleo que tenga un salario digno: me refiero a que se ha de hacer posible obtener un empleo que responda a los intereses de crecimiento personal del ciudadano y que se relacione con lo que estudió. Otro problema crónico en Puerto Rico es la falta de empleo en el grado universitario que se estudió, y eso tampoco es digno.
–Facilitar la aplicación de todas las ayudas gubernamentales disponibles a desempleados y a personas con empleos que no paguen lo suficiente para vivir una vida digna: Esto, creo, se está haciendo, pero no todo lo que se debe. A mí me consta personalmente que es imposible contactar la oficina de desempleo para preguntar que pasa con su solicitud de desempleo —me corresponde recibir desempleo, pero nunca se procesó mi solicitud por alguna razón que hasta hoy no se me ha informado, y lo solicité en diciembre. Estamos en julio. En todo ese periodo ha sido absolutamente imposible contactar a oficina de desempleo alguna. Eso es inaceptable y me consta que es la situación de miles de puertorriqueños con los consabidos puntos controvertibles—, lo que impide recibir la ayuda de desempleo que corresponde recibir. Sin embargo, con esto no solo me refiero a ayudas de desempleo: me refiero también a hacer posible a otro tipo de ayudas como el acceso al Plan Vital, el acceso a la tarjeta del Pan, el acceso a la tarjeta Única, el acceso a plan 8, el acceso a el celular gratuito del gobierno… en estos momentos, en los cuales la crisis ya está encima, lo que compete es facilitar todas las ayudas gubernamentales inmediatamente. Esto incluye muy en especial todas las ayudas necesarias en servicios de salud mental, especialmente a la población más vulnerable. En este aspecto Puerto Rico falla crasamente: los servicios de salud mental de Puerto Rico no solo no bastan, sino que los que se dan se dan de forma sumamente deshumanizante y impersonalizante, tratando a los pacientes y clientes psicológicos como meros objetos. Esto tiene que cambiar inmediatamente, y es extremadamente inaceptable.
–la creación de centros de desarrollo social en todo centro comercial (mall) de Puerto Rico: un centro de desarrollo social es un local vacío en el centro comercial donde se pongan computadoras que hagan posible que cualquiera tenga acceso a un email y a recursos mínimos para preparar un buen resumé. En esos centros de desarrollo social se deben ofrecer descuentos aplicables a personas socialmente vulnerables, workshops de integración a la vida profesional y de redacción de resumés, y por supuesto deben estar en una pared todas las ofertas de empleo del mismo centro comercial y de compañías y negocios limítrofes. Son centros para fomentar el desarrollo social de todo ciudadano, comenzando por los más vulnerables.
Medidas a corto plazo (medidas para aplicarse en el plazo de 1 a 2 años) para atajar el problema de falta de empleo digno en Puerto Rico
-Crear un incentivo económico o estímulo económico federal que cree una industria que genere empleos dignos en Puerto Rico: el principio de ética social del que hablaba al inicio de este texto, el que habla de que nunca se ha de hacer por una persona lo que la persona pueda hacer por sí mismo, se llama “principio de subsiriariedad” (lo busqué en el texto de la teología de la luz). Es mismo principio, que aplica a toda persona, se ha de aplicar a todo el pueblo de Puerto Rico: no se puede hacer por el pueblo de Puerto Rico lo que el pueblo de Puerto Rico puede hacer por sí mismo. La realidad es que el pueblo de Puerto Rico puede trabajar y ganarse el pan con el sudor de su frente… pero hay que ayudarlo a hacerlo posible. Lo que voy a decir a continuación se trata de una decisión de repercusiones éticas y sociales importantes: si ya sabemos que necesitamos fondos federales para salir de esta crisis, ¿cómo estarán mejor invertidos esos fondos federales: creando un incentivo económico o estímulo económico federal que haga posible la creación de empleos dignos, empleos con los cuales los puertorriqueños puedan trabajar y autosotenerse… o usar los fondos federales para crear en los puertorriqueños más dependencia gubernamental, siendo forzados a vivir de las ayudas del gobierno para sobrevivir, ante la falta crónica de empleo digno?
La respuesta correcta y más ética es bastante clara: es preferible invertir fondos federales en un incentivo económico federal que fomente una industria que cree empleos dignos en Puerto Rico, a invertirlos sencillamente dando más ayudas de gobierno a todos los puertorriqueños que no encuentren empleo o que se vean forzados a aceptar empleos que no dan para vivir dignamente, con todo el gasto gubernamental que ello implica.
Mientras Trump estaba en la presidencia la respuesta a qué tipo de incentivo económico federal se debía crear en Puerto Rico estuvo muy clara: durante la pandemia quedó clara la necesidad de tener una industria de manufactura médica sólida dentro de Estados Unidos para poder hacer frentes a crisis como una pandemia de tal forma que no se dependa de tener que comprar material fabricado en otras naciones. Es decir: la industria que se debe crear en Puerto Rico para comenzar a crear empleos dignos es la industria de manufactura médica. Eso cumple con una necesidad federal imperativa, y también cumple con una necesidad de Puerto Rico, que tiene mano de obra capacitada para este tipo de industria, también para la industria farmacéutica, tras la caída de las 936. Ahí tienen una respuesta realista para crear un incentivo económico federal para crear empleos dignos en Puerto Rico y romper con la dependencia gubernamental crónica de los ciudadanos puertorriqueños que no tienen más opción que vivir de ayudas de gobierno para sobrevivir.
Hay que crear una industria en Puerto Rico que cree empleos dignos a gran escala. No podemos permitir que se admita que la inmensa mayoría de todo un pueblo se vea forzado a vivir de ayudas del gobierno para poder sobrevivir. Es sencillamente inadmisible. Punto. Hay que crear un estímulo federal que cree empleos dignos en Puerto Rico. Esto es una tarea ineludible, tanto por razones económicas —me arriesgo a decir que cuesta más pagar las ayudas gubernamentales que hacer un estímulo económico que haga posible que se viva sin esas ayudas, trabajando dignamente— como por razones éticas —se tiene que aplicar el principio ético de subsidiaridad a todo el pueblo puertorriqueño: si somos capaces de trabajar, se nos debe ayudar a encontrar trabajo, no forzarnos a vivir de ayudas del gobierno por falta de empleo digno—. No sé qué opine el presidente Biden de esto que acabo de decir, pero en la presidencia de Trump se habló claramente de la posibilidad de un estímulo económico federal como este.
–agencias de empleo obligatorias para quienes reciben ayudas del gobierno: el gobierno de Puerto Rico debe crear agencias de empleo públicas, o crear alianzas con agencias privadas, que hagan posible que toda persona apta para trabajar que reciba ayudas del gobierno tenga que suscribirse obligatoriamente a una agencia de empleo, de tal forma que todo ciudadano que rechace cierto número de ofertas de empleo compatibles con su perfil profesional, por ejemplo, una persona que rechace 5 ofertas de empleo compatibles con su perfil profesional, sea declarada inelegible para recibir CUALQUIER tipo de ayuda del gobierno. Esto acaba de raíz con el problema de personas que, estando aptas para trabajar, eligen vivir del mantengo de ayudas del gobierno.
-énfasis en brindar ayudas a personas que trabajen: esta medida está muy de la mano a la anterior. Se tiene que enfatizar las ayudas gubernamentales a las personas que optan por trabajar, de tal forma que se facilite el tiempo de transición entre el tiempo de recibir ayudas federales y el tiempo en que se logra el autosustento, retirando las ayudas gubernamentales progresivamente, no de golpe, de tal forma que los ciudadanos tengan una ventana de tiempo razonable para comenzar a trabajar dignamente y todavía recibir al menos una ayuda gubernamental parcial, hasta que llegue el punto, una vez pasado cierto tiempo en trabajo estable, que las ayudas sean retiradas definitivamente, No se deben retirar las ayudas gubernamentales inmediatamente se encuentre el trabajo porque eso no alienta a buscar un trabajo. Hay que retirar las ayudas escalonadamente. Eso es lograr un énfasis en dar ayudas a las personas que trabajan.
-equiparación de todos los fondos federales aplicables: no tengo internet en estos momentos para buscarlo, pero de momento sé que en el Seguro Social y en el Medicaid Puerto Rico no recibe la misma cantidad de fondos que recibe un ciudadano estadounidense que vive en Estados Unidos continental. Presumo que en otros programas federales del Departamento de Educación, del Departamento del Trabajo, del Departamento de la Familia y del Departamento de la Vivienda, por mencionar algunas agencias de gobierno, pase lo mismo. Esta situación también es insostenible y tiene que acabar. Un ciudadano estadounidense que vive en Puerto Rico no tiene menos dignidad que un ciudadano estadounidense que vive en Estados Unidos continental. Se ha de pagar en Puerto Rico exactamente la misma cantidad que se pague a todo ciudadano igual en Estados Unidos. No se pide ni mas ni menos que lo que se da a cualquier otro ciudadano americano, porque vivir en Puerto Rico no ha de hacernos ciudadanos de segunda clase. Da grima ver a personas mayores tener que trabajar sencillamente porque el seguro social no les da. Eso también causa crisis de empleo digno: la falta de empleo digno para personas de tercera edad que deberían estar recibiendo su seguro social digno. Insisto, esto tiene que acabar. Un ciudadano en Puerto Rico no tiene menos dignidad que un ciudadano en el resto de Estados Unidos: todo fondo federal que no sea equitativo debe equipararse, como es lo justo y lo digno.
–equiparación al salario mínimo del salario de los confinados que laboren como parte de su proceso de rehabilitación: fomentar el empleo digno también aplica a los hermanos confinados, que tienen la misma dignidad que cualquier otro ciudadano. Se tiene la mala costumbre de pagar un salario ínfimo, muy por debajo del salario mínimo, a los confinados que como parte de su proceso de rehabilitación. Eso tiene que acabar. El salario mínimo ha de aplicar a absolutamente todos, también a los confinados. Ellos también tienen derecho a un trabajo digno.
Medidas a largo plazo (medidas para aplicarse en el plazo de 5 años) para atajar el problema de falta de empleo digno en Puerto Rico
–política pública de generar empleos dignos en Puerto Rico: esta medida implica que el generar empleos dignos no ha de tratarse solo de reacción a una crisis, sino que se trate de política pública permanente, con iniciativas como, por ejemplo, dar premios a las empresas que se destacen por generar empleo digno, hacer que el gobierno mismo de ejemplo de generar empleo digno, y de crear —no sé si algo como esto ya existe—una agencia gubernamental de empresarismo que fomente que las personas aprendan a administrar sus propias empresas, ya sea vendiendo artículos en Amazon o en Ebay, ya sea convirtiéndose en artesano, o cualquier otra forma de autoempleo digno para aquellas personas que no encuentren un empleo digno compatible con su perfil profesional y personal. También debe de haber ayudas gubernamentales específicas para fomentar la creación de empleos dignos.
–fomentar la orientación y formación vocacional y profesional en estudiantes de escuela intermedia y superior: cultivar una cultura de trabajo y de empleo digno ha de comenzar con los más jóvenes. Tan pronto como al comenzar la escuela intermedia se debe comenzar a fomentar los intereses vocacionales y las orientaciones vocacionales, con iniciativas como ferias vocacionales y tests que ayuden a los estudiantes a descubrir sus talentos y aptitudes, descubriendo formas vocacionales y profesionales para convertirse en ciudadanos de bien que se autosostienen con un empleo digno. A nivel superior se debe fomentar que todo estudiante que tenga el deseo de hacerlo pueda hacer algún tipo de certificación técnica en algún tipo de centro de estudios técnicos que admita en horario sabatino a estudiantes de high school que sea elegibles, de tal forma que haga posible que el estudiante de high school que así lo desee salga de high school ya con una certificación profesional que le integre a la fuerza laboral tan pronto salga de high school, si ese es su deseo. El presidente Biden tiene una medida en este sentido que debe fomentarse, porque es una gran idea: ofrecer educación gratuita de dos años en community colleges para estudiantes que opten por una carrera técnica al salir de escuela superior, de tal forma que puedan recibir gratuitamente la formación mínima para poder trabajar dignamente… pero esto puede adelantarse y comenzarse desde high school, haciendo posible que estudiantes de high school hagan certificaciones técnicas en escuelas vocacionales o incluso en community colleges que estén dispuestos a adaptar su oferta al horario y nivel educativo de estudiantes de high school. Si es posible que estudiantes talentosos puedan estudiar cursos en universidades, ¿por qué no hacer posible que estudiantes que así lo deseen y que cumplan con los requisitos estipulados puedan hacer una certificación profesional técnica mientras completan su high school? También hay que hablarle a los estudiantes de todas las ayudas federales disponibles para hacer posible sus estudios universitarios o técnicos, para que sea posible que todos reciban la formación profesional y técnica de su preferencia y puedan integrarse a la fuerza laboral de tal forma que puedan tener un empleo digno conforme a sus aptitudes y opciones.
–facilitar que todo estudiante se gradúe de high school con una primera experiencia de empleo en alguna de sus vacaciones de verano: para facilitar un empleo digno hay que facilitar experiencias de empleo para los que las necesitan más. Se puede crear un programa que haga posible que todos los estudiantes de escuela superior que opten por ello puedan tener una experiencia de empleo, aunque sea solo de dos semanas del verano, que pueda contar como una primera experiencia de empleo en su resumé. Las empresas podrían recibir incentivos por colaborar con esta iniciativa. En lo posible, la experiencia laboral ha de estar relacionada con los intereses del estudiante.
–facilitar la integración de personas con diversidad funcional en ambientes laborales: las personas con diversidad, incluyendo a los ciudadanos con síndrome Down, también tienen derecho a un empleo digno y a un sustento digno. Se debería crear algún incentivo que promueva la diversidad funcional en ambientes laborales.
–facilitar que estudiantes de escuela superior opten por estudiar carreras de alta demanda laboral en Puerto Rico: se debería crear algún tipo de beca de servicio público para estimular a estudiantes que optan por estudiar carreras de alta demanda, como maestros de inglés y maestros de educación especial.
–crear una oficina del Departamento del Trabajo que maneje concretamente el empleo juvenil y todas estas medidas que he mencionado para promover la orientación profesional y vocacional en estudiantes de middle school y high school: como pueden notar, he mencionado muchas medidas a largo plazo relacionadas con el promover la orientación vocacional y profesional de estudiantes de escuela intermedia y superior. Todas estas medidas deberían ser asumidas por una misma oficina que fomente el desarrollo vocacional y profesional de estudiantes escolares. Podría llamarse Oficina de Desarrollo Laboral Juvenil, adscrita al Departamento del Trabajo. No se debe esperar a que un ciudadano tenga un grado técnico o universitario para promover una cultura del trabajo: esto tiene que empezar desde temprano, haciendo posible que desde que sea razonablemente indicado los estudiantes escolares comiencen a explorar sus talentos y aptitudes y medios para desarrollarlos laboralmente.
–hacer de la aportación a la seguridad social obligatoria por ley: la situación en la que están los maestros en Puerto Rico, trabajando sin que el patrono —el mismísimo Gobierno— aporte al seguro social, es totalmente inadmisible e indigna. En un plazo de 5 años se tiene que crear una ley que haga absolutamente ilegal que cualquier trabajador puertorriqueño no reciba su debida aportación al seguro social. La aportación al seguro social es parte de todo trabajo digno.
–erradicar el “enchufismo”, especialmente del gobierno: hay que afirmar la meritocracia en el proceso de contratación, especialmente de empleos del gobierno y de servicio público. No es en lo absoluto digno que un trabajador sea consciente de estar totalmente cualificado para un trabajo, pero no recibirlo sencillamente porque ya había un “enchufao” (un hijo de fulano o mengano, especialmente si es donante político) para ocupar el puesto y la convocatoria de empleo se hizo por mero protocolo, sin considerar realmente al resto de los candidatos. A este problema yo lo llamo “enchufismo”: la mala costumbre, especialmente en trabajos del gobierno, de necesitar un “enchufe” (un contacto) para tener un empleo, en lugar de basarse en lo que debe basarse: meritocracia. Se ha de promover el debido proceso de convocatoria y de entrevistas para la obtención de un empleo en el gobierno y servicio público, y se ha de escoger en todo momento a la persona más preparada para el puesto. Se tiene que erradicar especialmente la mala costumbre del enchufismo político, el contratar empleados en el gobierno por afiliación política. Salvo el necesario cambio de algunos empleados de puestos muy determinados de confianza, que son de número ínfimo, nada justifica que cada vez que haya elecciones haya una migración de cientos de empleos en las alcaldías en las que hay cambio de partido político. De hecho, llegué a escuchar en radio que se reconocía que para formar parte de los empleados de la AEE (que ya no existe, ahora está LUMA) hacía falta carta de padrinazgo político. El reconocer eso públicamente me parece atroz. Lo mismo aplica al resto de las agencias del gobierno. Hay que crear una sólida política pública de meritocracia, estableciendo un debido protocolo para el proceso de convocatoria de empleo, un protocolo que se aplique sistemáticamente y que garantice que haya meritocracia, no enchufismo.
–fin de las leyes de cabotaje: no tengo internet para buscar los datos concretos, pero me arriesgo a decir que lo que más encarece el costo de vida en Puerto Rico —y por tanto dificulta que un empleo sea un empleo digno, que sea proporcional al costo de vida de Puerto Rico— son las leyes de cabotaje. Los puertorriqueños pagamos una cantidad tremendamente onerosa en todo tipo de productos, incluyendo los alimentos, sencillamente por la aplicación de las leyes de cabotaje. Ese costo tiene que abaratarse en un periodo de tiempo razonable, para hacer más accesible a todos los puertorriqueños un empleo digno que sostenga a una familia dignamente.
Hasta aquí todas mis sugerencias para atajar la falta de empleo digno en Puerto Rico. Es evidente que este es un problema tremendamente complejo que no se resuelve de la noche a la mañana, especialmente tras llegar al extremo al que ha llegado esta crisis laboral en Puerto Rico. Espero que todas estas sugerencias puedan al menos generar procesos de cambio que hagan posible que a nadie le falte un empleo digno en Puerto Rico. Incluso si yo misma no me llegue a beneficiar personalmente de esos cambios, lo que beneficia a un hermano beneficia a todos.
Aunque no lo crean, todo esto que acabo de hacer es parte de vivir mi vocación de pastora doméstica, haciendo familia no solamente humana y eclesial, sino también civil según el plan de Dios, haciendo familia que da a luz a la Palabra haciendo posible una sociedad civil en la que todos puedan vivir como hermanos dignos. Una fe que no tenga repercusiones sociales no es una fe que abarque toda la persona, es una fe que no es encarnada, no es una fe que da a luz a la Palabra, que cumple la voluntad del Padre. Realmente estoy muy contenta de descubrir esta nueva vocación de pastora doméstica de la que ya he hablado en el texto All Lives Matter, All Loves Matter: Una Revolución de Luz y que me mueve a vivir la fe con todas sus consecuencias, incluyendo sus repercusiones sociales. No se puede vivir la fe y tolerar que haya hermanos que sean forzados a vivir indignamente.
Habitualmente al compartir cada blog post también comparto las ideas creativas contemplativas que haya tenido durante el tiempo que estuve offline. Algunas de estas ideas creativas contemplativas que comparto aquí realmente correspondían ser escritas en el último blog post donde escribí ideas creativas contemplativas, pero sencillamente no recordé escribirlas en ese momento y por eso lo hago ahora. La inmensa mayoría de estas ideas que incluyo en este blog post son ideas contemplativas creativas contemplativas que tuve tras ese último blog post con ideas contemplativas creativas (el blog post del 15 de julio, no el del 16 de julio).
En fin, he aquí todas las ideas contemplativas creativas que se he contemplado en estos días que he estado offline haciendo más y más vida esta vocación de luz —saluden y recen por los hermanos vecinos que subieron el reguetón al escribir esa última oración—:
–Christian Family Fest: Un día o un fin de semana de predicación de predicadores de diversas denominaciones en Puerto Rico, todas predicando del Amor de Dios, de la fraternidad que nos ha unir a todos como familia cristiana y de crecer como familia cristiana, con actividades cristianas para todos los miembros de la familia, sea cual sea su denominación. Sería un festival de fraternidad ecuménica, donde todos nos ayudemos a crecer como hermanos que crecen en comunión. Es como un preaching fest multidenominacional, todos hablando juntos de algún aspecto de ser iglesia familia o de ser familia que es imagen viva del Amor de Dios. Esto incluso podría hacerse una vez cada año.
–Nachos del nuevo albor: nachos de color rojo, amarillo y azul, los colores de la bandera de Goeiz.
–Family Camps: un campamento de verano para toda la familia. También puede ser un camping fest. Los predios de la Hacienda Nuevo Albor que se construya como sede sur-oeste de la Escuela Goeiz podría tener facilidades de family camping para hacer family camps.
–Una orden religiosa o congregación religiosa de Jesús Caridad: ya he hablado del orden de la caridad como orden diocesano de matrimonios consagrados, pero esto que se contempla en esta idea contemplativa creativa es algo distinto. Me explico. Tengo entendido —no tengo internet ahora para comprobarlo— que en New York existe una congregación religiosa femenina dedicada al apostolado de la vida (a pro-life religious order). ¿Por qué no crear una orden religiosa dedicada allí apostolado familiar, a llevar adelante la pastoral familiar de los laicos? Esto no es una orden diocesana como el orden de la caridad, esto sería una orden religiosa. Pueden servir en parroquias o tener sus propias obras apostólicas, como una escuela que fomente la integración de la fe en la vida doméstica, promoviendo el desarrollo de toda la familia como pastores domésticos, comenzando por los padres, fomentando una educación católica donde los auténticos protagonistas sean los padres, brindando no solo educación a los hijos sino también formación pastoral doméstica. También pueden llevar adelante cuidos de niños y cuidos de ancianos, una casa de retiros familiares —que yo sepa en Puerto Rico no hay ni una sola casa de retiro en la que se hagan retiros familiares—, obras apostólicas directamente relacionadas con fomentar una vida familiar auténticamente cristiana, dando formación doméstica cristiana en sus obras apostólicas. Yo sé que toda congregación religiosa tiene ciertas actividades para laicos, para parroquias y para familias… pero de lo que estoy hablando es de una orden religiosa cuyo carisma congregacional sea fomentar el carisma de crear hogar, Iglesia y humanidad que resplandecen en más y más comunión, haciendo familia humana, eclesial y civil según Su plan. Es decir: sería una congregación cuyo carisma es ayudar a crecer a las iglesias domésticas ya las patrias domésticas en más y más correspondencia a la voluntad de Dios y a la gracia del Espíritu Santo. Créanme, esta idea agrada muchísimo a Jesús Caridad, pero yo no tengo vocación religiosa para realizarla. De hecho, jamás he escuchado del caso de una laica fundando una congregación religiosa, ni siquiera he leído del caso de una laica renovando una institución religiosa de tal forma que abracen un nuevo carisma —esto también puede ser lo que Jesús Caridad desea, que ese “crear una nueva congregación” sea abrazar este carisma como renovación religiosa institucional de congregaciones ya existentes—. Si realmente esta idea contemplativa es de Jesús Caridad, ya inspirará a la persona correcta, una persona con vocación religiosa, la luz para llevarla adelante. Si la persona a la que Dios Amor llame para esto está dispuesta a seguirle más y más de cerca mar adentro, estaría dispuesta a brindar toda la ayuda que pueda brindar para hacer este sueño de Jesús Caridad posible. Me atrevo a decir que esta nueva congregación de Jesús Caridad debería nacer en Puerto Rico: Puerto Rico es el lugar del mundo con más iglesias con millas cuadradas, y ese es el regalo que Jesús Caridad a su Nuevo Belén en Puerto Rico. Algo que contemplé concretamente de esta idea contemplativa es que de surgir las suficientes vocaciones religiosas como para llevarla adelante —esto no viene de mí, sino de El, que es Quien llama a quienes quiere—, se les debe construir un convento en los mismos predios donde esté la escuela-santuario del Nuevo Albor en Ponce. Créanme, amo la vida religiosa y me hubiera encantado recibir esa llamada, pero no lo tengo. No puedo ser yo la persona llamada a realizar este sueño de Jesús Caridad. A quienes se sientan llamadas, hablen con sus obispos y directores espirituales.
–Un carnaval de fraternidad: la diferencia entre un fraternal fest y un carnaval de fraternidad es que los carnavales de fraternidad son coordinados por municipios, y los fraternal fest son para parroquias. Un carnaval de fraternidad es un carnaval donde varios municipios celebran la fraternidad que nos une como pueblo luz. Por ejemplo: Bayamón —nací en Bayamón— es un buen lugar para un carnaval de fraternidad porque pueden llegar hasta allí personas de diversos municipios. En un carnaval de fraternidad ha de haber de todo tipo de actividades para celebrar juntos la fraternidad: actividades deportivas —torneos de baloncesto, voleyball y otros deportes—, actividades culturales —torneos de dominó, competencias de talla de santos, manualidades y artesanías, conciertos al aire libre o en coliseos disponibles, obras de teatro, exposiciones de arte— y actividades especialmente diseñadas para toda la familia —granjas de animales para niños, espectáculos infantiles de todo tipo, música de trio para los abuelos etc— de tal forma que todos puedan tener un buen rato de fraternidad civil. Otro lugar muy bueno para tener un fraternal carnival es Orlando, Florida. Estoy dando ejemplos concretos de lugares donde sería estupendo celebrar carnavales de fraternidad, pero realmente se pueden celebrar por cualquier municipio. Se trata de abrir espacios donde todos celebremos juntos la fraternidad que nos ha de caracterizar como jíbaros del nuevo albor y americanos del nuevo albor, como pueblo familia donde todos resplandecen como hermanos. Lo ideal es que los gastos no sean asumidos solo por el municipio, sino también por negocios que aporten a modo de colaborar juntos por construir pueblo luz. Por ejemplo: una ferretería como National podría pagar una hora de música de trío, una tienda de ropa infantil o una tienda como Build-A-Bear podría pagar una hora de espectáculo de Atención Atención para niños, una cafetería como Café Don Juan podría donar 200 pocillos o poner un carretón para venderlos a buen precio, una panadería podría donar donas o venderlas a muy buen precio… así sucesivamente, puede haber muchísimos negocios que pueden aportar a un carnaval así. Este tipo de actividades se prestan para que los negocios también se demuestren fraternidad. Por ejemplo: si National dona una hora de música de trío, que Home Depot done la segunda. Son dos negocios de competencia colaborando por servir juntos al bien común del pueblo, mostrando así no solo fraternidad civil, sino también fraternidad empresarial. Así al crear espacios para celebrar la fraternidad también creamos espacios para celebrar juntos el ser familia que resplandece en más y más comunión, el ser sociedad donde todos crecen como hermanos.
–Un skate park: esto lo pensé para un lugar que en Toa Alta se llama “el Mandril”, pero realmente puede desarrollarse en cualquier parte de Toa Alta: un lugar de esparcimiento recreativo sano para nuestros hermanos niños y jóvenes skaters, donde se pueda correr con patineta y patines. No podemos desistir del empeño de abrir espacios recreativos sanos para nuestros jóvenes, para hacer posible que crezcan como ciudadanos de bien, como ciudadanos luz, como la mejor persona que puedan ser. Un skate park es un ejemplo de ese tipo de esparcimiento. Se puede pedir a compañías relativamente grandes y muy envueltas con el sano desarrollo de las comunidades, como Goya, Toyota o Coca Cola, que aporten para la construcción de espacios como este. Una vez abiertos, el municipio correría con los gastos de mantenimiento y ornato, iluminación y seguridad. Algo como esto sería un gran ejemplo de colaboración entre empresa privada y autoridades municipales.
–Adopt-an-Abuelo: Lo que acabo de escribir significa, en buen spanglish, ”adopta-a-un-abuelo”. No sabría exactamente a quién le competería desarrollar una idea creativa contemplativa como esta —no sé si exista una oficina de asuntos de la vejez, si existiera creo que es a ellos a quienes le competería desarrollarla— pero esta idea contemplativa se trata de desarrollar un programa de “adopción social” de abuelos que estén de acuerdo en dejarse adoptar y que vivan en centros de envejecientes o égidas municipales. Los adoptantes de los abuelos serían estudiantes seniors de escuela superior, o sea, esto sería coordinado entre high schools y centros de envejecientes. También podría darse en otra versión: que las escuelas superiores adopten centros de envejecientes enteros, procurando que los estudiantes seniors de escuela superior vayan, por ejemplo, una vez al mes a interactuar con los envejecientes (con los ciudadanos seniors; la coincidencia del uso de la palabra “seniors” no es accidental: son estudiantes seniors apoyando a ciudadanos seniors) de determinado hogar con el que ya se haya establecido el contacto y el acuerdo de visita. Esto incluso puede contar como horas de voluntariado comunitario requerido para los estudiantes como parte de sus requisitos de graduación. Esto enseña a los estudiantes seniors lecciones de empatía social con los más vulnerables y lecciones de ciudadanía responsable: hemos de hacer posible que absolutamente todos vivan con la dignidad que les corresponda, hasta el último instante de sus vidas, sin permitir que nadie se sienta solo en sus últimos días en nuestra sociedad, y tendiendo puentes que ayuden a valorar la tradición de nuestro pueblo, encarnada en nuestros abuelos.
–Zonas de desarrollo comunitario en las universidades o instituciones de educación superior: toda universidad en Puerto Rico —indiferentemente sea privada o pública— debería tener en sus bibliotecas una zona de desarrollo comunitario bien delimitada y claramente conocida donde cualquier miembro de la comunidad pueda ir a usar una computadora, usar WiFi o hacer tareas de estudios con sus hijos o nietos. Debe ser una zona donde se puedan usar computadoras y leer libros por cualquier miembro de la comunidad, sea una familia, un abuelo o estudiantes de escuela superior que necesitan hacer un trabajo de la escuela y no tienen computadora o recursos en su casa. Se trata de tener una zona que integre a la comunidad dentro de la universidad, que tanto la comunidad se acostumbre de que la universidad es una zona de desarrollo comunitario y también los estudiantes de la propia universidad se acostumbren a ver la universidad como una zona de desarrollo comunitario. Incluso se podrían dejar que personas de la comunidad lean libros de la biblioteca de la universidad con propósitos educativos, dejando una identificación valida mientras se usa el libro, solamente dentro de la biblioteca. Si quieren ir más lejos, se pueden anunciar en esas zonas de desarrollo comunitario pequeños workshops gratuitos para la comunidad con temas de interés general, impartidos por estudiantes de la institución, supervisados por algún profesor o mentor comunitario. Por ejemplo: un estudiante de administración de empresas talentoso o un grupo de estudiantes talentosos de administración de empresas puede dar un workshop comunitario de gestión financiera básica en el hogar para personas de la comunidad que interesen asistir. Voy a ir más lejos: a todo estudiante universitario se le debe requerir como requisito de graduación que imparta un workshop comunitario gratuito diseñado por el propio estudiante o por un grupo de estudiantes en conjunto, con un tema de interés general que sea pertinente a su grado y que pueda darse gratuitamente, de tal forma que se enseñe que para ser un auténtico universitario no basta con obtener un grado: hay que aportar al bien común con ese grado que se obtiene. También se puede enviar a los estudiantes universitarios a lugares concretos a impartir el workshop, como por ejemplo: estudiantes talentosos de finanzas ir a dar un taller de qué es el credit score y como cuidarlo a estudiantes de escuela superior, o incluso a estudiantes universitarios de primer año. Otro ejemplo: un grupo de estudiantes graduandos de enfermería dando un workshop comunitario o a estudiantes de escuela superior de primeros auxilios básicos. Además de las razones sociales para tener una zona de desarrollo comunitario en cada universidad, pienso que no hay mejor promoción para una universidad que su aportación a la comunidad y especialmente a los estudiantes de escuela superior que ya no buscan obtener un mero grado académico, sino obtener un grado académico que también ayude a transformar a la sociedad en una mejor sociedad para todos. O sea: si lo que se gastan en marketing se lo gastan en una buena zona de desarrollo comunitario que sea conocida por todos los estudiantes de escuela superior de los pueblos adyacentes y también de la comunidad adyacente, pueden hacer más promoción de la universidad que todo lo que se gastan en mero marketing en medios de comunicación. A esto yo lo llamo marketing integractivo: marketing que integra la formación personal, que ayuda a crecer como la mejor persona que podamos ser y el mejor ciudadano que podamos ser, haciendo posible la mejor sociedad que podamos ser. Es márketing que integra el promover el mejor desarrollo social y personal posible de todos, no márketing que es un mero anuncio en el cine o en la televisión.
–centro de desarrollo social en los malls: de esta idea contemplativa ya he hablado antes, pero voy a profundizarla más ahora. Todo centro comercial debería tener, por modesto que sea, un centro de desarrollo social que integre el desarrollo social en el mall. Es decir: al consumidor ya no le basta sencillamente comprar en un centro comercial, el consumidor también quiere hacer una diferencia social al comprar donde compra. Un centro de desarrollo social convertiría a los malls en zonas de desarrollo comunitario al tener una zona concreta con un locutorio comunitario (computadoras, teléfonos públicos) que puedan usarse por tiempo limitado (por ejemplo: 10 minutos el teléfono y 30 minutos la computadora) que haga posible que absolutamente cualquier persona pueda encontrar en ese mall, por pobre que sea la persona, medios para avanzar socialmente, pues las computadoras hacen posible que pueda hacerse un buen resumé y el teléfono público hace posible que cualquier persona pueda hacer las gestiones más básicas para una entrevista de empleo, sin contar el uso más básico de un teléfono en un centro comercial: el que un cliente se comunique con la familia en caso de que el celular se quede sin carga o se le dañe. Esta zona también debería tener un salón de workshops comunitarios donde se puedan impartir workshops de interés general a la comunidad que viene a comprar al mall y pertinentes a productos que se vendan en el mal o al consumismo responsable. Ejemplos de este tipo de workshops pueden ser: workshops de social influencing, workshops de cuidar el credit score (si hay un banco en el centro comercial), workshops de gestión económica responsable (para saber cuanto gastar responsablemente en las tiendas), workshops de tecnología para adultos mayores (usando las computadoras del mismo centro comunitario del mall), workshops de uso básico de computadoras, workshops de creación de resumé… workshops que hagan posible el desarrollo social más pleno posible de todos. En este centro comunitario deben estar todas las ofertas de empleo disponibles en todo el centro comercial, para que los que busquen empleo tengan un lugar centralizado para saber donde hay oportunidad de empleo en el centro comercial. Además del evidente propósito de desarrollo social de un centro como este en un centro social, en el contexto social de Puerto Rico este tipo de centros también tienen otro propósito muy concreto: Puerto Rico es lo que puede llamarse una zona de potencial catastrófico. Quiero decir: en Puerto Rico en cualquier momento puede ocurrir un desastre mayor, sea un huracán o un terremoto. En caso de que haya desastre mayor —Dios no lo quiera, pero esto siempre es una clara posibilidad en Puerto Rico—, los centros comerciales pueden poner al servicio de toda la comunidad sus centros de desarrollo social, haciendo posible durante la emergencia —de hecho, FEMA debería auspiciar este tipo de iniciativas en esas circunstancias— la comunicación con teléfonos y computadoras de uso público, considerando que los malls suelen tener potentes sistemas de emergencia para contar con electricidad y comunicaciones en casos de desastre mayor. De hecho, esto significa que los centros de desarrollo comunitario deben estar preparados con un potente WiFi de uso público y enchufes en los alrededores del centro para que también los ciudadanos que tengan computadora puedan ir con ellas al mall a usarlas en esa zona en caso de emergencias —insisto: FEMA debería estar envuelto de alguna forma en este tipo de iniciativas, debe haber lugares concretos donde en caso de desastre mayor los ciudadanos sepan a donde ir para poder comunicarse si todos los sistemas de comunicación habituales fallan, como pasó con el huracán María, y no se debe esperar a que pase el desastre mayos para tomar acción proactiva, el mero hecho de estar en zona de desastre catastrófico potencial debe ser suficiente para que FEMA auspicie de alguna forma el establecimiento de centros de desarrollo social donde sea posible la comunicación en situaciones de desastre mayor—. Los centros comerciales no deben estar solos en esta encomienda social: deberían contar con el claro apoyo de compañías de telecomunicaciones como ATT, Sprint, T-Mobile, por decir algunos ejemplos, que auspicien el internet y los servicios de telecomunicaciones estos centros de desarrollo social. Hay otra cosa que se puede hacer en estos centros de desarrollo social o en los alrededores: el dar los celulares del gobierno que son gratuitos para personas con escasos recursos. Esta servidora en estos momentos está sin celular porque no sabe donde solicitar uno de esos celulares. Un centro de desarrollo social es el lugar perfecto para algo así, un lugar en el que todo el mundo sepa que hay celulares gratuitos disponibles para quien cualifique. Si no se puede hacer en el mismo centro, basta con poner un carrito con ese servicio cerca del centro. Luego de rezarlo, escribí una carta a los dueños y administradores de Plaza Las Américas proponiéndoles que abran un Centro de Desarrollo Social como el que acabo de describir en esta idea contemplativa. Ellos son el mall más grande de Puerto Rico. A ellos les corresponde el deber de dar ejemplo social a todos los demás —Los hermanos vecinos están haciendo sonar los ruidos de falsos gallos que se escuchan en todo el barrio mientras escribo estas líneas, 2:21 de la tarde)—de tal forma que como empresarios hagamos posible un Puerto Rico paz, una Isla Luz donde todos resplandezcamos como hermanos, creando malls que no solo son el centro de todo sino también el centro de todos.
–gestor comunitario: esta idea contemplativa, muy relacionada con las dos anteriores, es realmente una nueva profesión. Puede parecer que se trata de meramente hacer gestiones con la comunidad, pero no me refiero al sentido de gestor que viene del sustantivo gestión, sino al sentido de gestor que viene del verbo gestar: se trata de empleados que gestan comunidad en la empresa o compañía o lugar de empleo, se trata de empleados que dan a luz a un ambiente laborar plenamente integrado a la comunidad social a la que se sirve, siendo el punto de enlace entre la compañía y la comunidad. Puede haber muchos tipos de gestores comunitarios, pero en este blog post ya he mencionado dos: gestores comunitarios universitarios, personas en la universidad cuyo énfasis laboral es enlazar a la universidad con la comunidad —los gestores comunitarios de una universidad pueden ser los que coordinan los workshops de los estudiantes o los que coordinan la zona de desarrollo comunitario— y también estarían los gestores comunitarios de centros comerciales, los que trabajan en el centro de desarrollo social y los que enlazan al centro comercial con la comunidad, creando juntos una mejor sociedad para todos. Han de ser empleados con gran sensibilidad social y humana, capaces de trabajar sirviendo al bien común tanto de la empresa como de la comunidad. Han de ser empleados con gran carisma social para identificar el lado humano y social del servicio que provee la empresa. En el caso de un gestor comunitario de un centro comercial, ha de saber identificar formas de servir al consumidor de tal forma que también se cree una mejor comunidad para todos y se haga posible el mejor crecimiento posible de todos como ciudadanos luz. Por ejemplo, los gestores comunitarios pueden ser los encargados de coordinar workshops comunitarios en el centro de desarrollo social del centro comercial. Realmente todo ambiente laboral debe tener algún tipo de gestor comunitario que haga posible un ambiente profesional que cree una mejor sociedad para todos.
–social communication point o emergency communication point (ECO Point): esta sugerencia, ya implicada en la idea contemplativa anterior, es concretamente para FEMA. Supongo que en algún momento escribiré una carta para proponérselo —no sé si tienen una oficina que admita sugerencias de ciudadanos—. En caso de lugares como Puerto Rico y Florida, donde se sabe que es zona de huracanes, o en el caso de Puerto Rico también zona de terremotos, se deben establecer ciertos social communitation points o emergency communication points o disaster communication points, lugares en los cuales todos los ciudadanos sepan de antemano que en caso de desastre mayor —como huracanes o terremotos— que interrumpan los servicios de telecomunicaciones habituales (esto lo vivimos todos los puertorriqueños al pasar el huracán María), podrán ir a esos puntos a comunicarse con el exterior o usar sus redes sociales. Esto es algo que en el caso de zonas de desastre potencial inminente como Puerto Rico y Florida se debe pensar antes del desastre, no después, ni mucho menos durante. Propongo la creación de social communication points en los Centros de Desarrollo Social de los malls porque los malls son usualmente lugares accesibles a todos —no están en zonas inundables, todos saben donde están, puede ir toda la familia— y donde se puede establecer un locutorio público dentro del Centro de Desarrollo Social que en caso de desastre mayor funcione como social communication point o Emergency COmmunication Point (ECO Point), Por supuesto, los eco points —o como sea que los llamen, mi conocimiento de nomenclatura de sistemas de emergencias es limitado— también puede funcionar como punto para solicitar las ayudas de FEMA por internet. Otro lugar que clarísimamente pueden funcionar como social communication points pre-establecidos en caso de emergencia son las bibliotecas de las universidades o incluso bibliotecas municipales si existen (en Puerto Rico son muy raras). Se trata de lugares que no se derrumban fácilmente —que son habitualmente construido a prueba de terremotos—, que son accesibles a todos —lugares claramente conocidos, en zonas no inundables— y que cuenten con los recursos para garantizar la comunicación en caso de desastre mayor (por ejemplo: que tengan planta eléctrica que haga posible que todo el mundo traiga su cargador para cargar sus devices, que tengan una potente red WiFi, que tengan apoyo de comunicación satelital de ser necesario, que tengan teléfonos que puedan ser usados por todos). No se debe esperar a que ocurra un desastre mayor para pensar en el aspecto comunicativo de un desastre. La ciudadanía necesita tener medios claros para comunicarse en caso de un desastre mayor, lugares que también pueden ser utilizados para gestionar todo tipo de ayudas iniciales.
–centros de desarrollo integral: en esta semana y hoy mismo en la mañana escuché en la radio que en Puerto Rico hay un grave problema de salud mental. Por ejemplo: el locutor proponía que tras el problema del voceteo parece haber un problema de salud mental de personas que hacen cosas para molestar deliberadamente a los demás —yo podría dar bastantes más ejemplos de hermanos ciudadanos que hacen cosas para molestar deliberadamente, pero pienso que el voceteo es un gran ejemplo—. La noticia también decía que los pacientes del Plan Vital del Gobierno tienen graves problemas para accesar a servicios de psicólogos por falta de proveedores, Le creo: yo como paciente del plan Vital nunca tuve acceso a servicios psicológicos que fueran compatibles con mi fe. Hoy mismo también —mientras escribo esto es domingo, 18 de julio de 2021— el sacerdote que dio la misa en Tele Oro, la emisora de televisión católica de Puerto Rico— habló también de que en Puerto Rico hay un grave problema de salud mental, cuya raíz es la falta de ser y exceso de hacer. Tuve una idea creativa contemplativa para ayudar a que en Puerto Rico hayan más servicios psicológicos: que Caritas Puerto Rico abra al menos uno en cada diócesis de Puerto Rico —pueden ser más en algunos casos, según la proporción de población a la que se sirve— un centro de desarrollo integral donde se ofrezcan servicios psicológicos de salud mental que promuevan el desarrollo integral de todos los puertorriqueños. Serán servicios psicológicos impartidos por la iglesia católica, pero cualquier ciudadano podría acudir. ¿Cómo financiar una idea como esta? Con las velas de coquito que diseñé hace algún tiempo atrás, cuyos fondos son para Caritas, en principio eran para canastas de Thanksgiving y de Navidad, pero podemos usar esos fondos también para crear y sostener centros de desarrollo integral, al menos uno en cada diócesis, más uno en Toa Alta, donde ha ocurrido la peor crisis social de salud mental que haya sucedido en la historia de Puerto Rico. Estoy muy segura de que cuando el mundo entero se entere del grave problema de salud mental que ha habido a mi alrededor a lo largo de los años al explotar niños, ancianos, mascotas, al usar la vida social misma como herramienta de manipulación psicológica, con toda la perversión psicópata que ello implica… querrán colaborar en facilitar servicios integrales de salud mental integrales en todo Puerto Rico. Créanme, los servicios de salud mental que se reciben en el Gobierno no son integrales. Los puertorriqueños necesitamos servicios de salud mental integral, que abarque a toda la persona. La crisis de servicios de salud mental en Puerto Rico es tan profunda que en mi caso se usaron los mismísimos servicios de salud mental en Puerto Rico para torturar y encubrir tortura, violaciones de derechos humanos y crímenes de odio. Esto solo se resuelve abriendo centros de desarrollo integral que den servicios de salud mental que sean integrales, que abarquen a toda la persona. De estos fondos también se puede hacer posible pagar un psicólogo para cada escuela católica en Puerto Rico —aunque en otros lugares las escuelas católicas son conocidas por sus altos costos, las escuelas católicas puertorriqueñas son tan baratas que no son capaces de financiar recursos como este y la mayoría están desapareciendo porque no pueden sobrevivir la crisis—, fomentando un desarrollo integral también entre los jóvenes de Puerto Rico.
–Longaniza-n-Chips: hoy —domingo, 18 de julio de 2021— no hay nadie en la casa, así que pude caminar, ver misa en televisión y comer de la comida que dejaran. Dejaron unas longanizas puertorriqueñas con las que me hice algo como fish-and-chips, pero con longaniza. Cuando pueda diseñar la longaniza del nuevo albor podríamos hacer un plato de longaniza-n-chips, longaniza con papas cocinadas en el aceitito de la longaniza.
–Doggie Longaniza: las peludas y el peludo, que han estado muy renuentes a comer durante las últimas tres semanas, se zamparon una longaniza de muy buena gana. Lo que me da la idea creativa de proponer que se ofrezca en chinchorros pet friendly un plato de doggie longaniza en el menú, para que los peludos también disfruten una buena comida con esas longanizas que no sean tan perfectas para consumo humano, pero sean perfectas para los peludo, o incluso longanizas que se hagan con los cortes de carnes que no sean tan perfectos para consumo humano, pero sean perfectos para peludos. De hecho, los supermercados podrían preparar doggie longanizas moliendo la carne de los cortes que no son idóneos para consumo humano, pero son ideales para peludos, indicando claramente que no son para consumo humano sino para consumo canino.
–Un Estudio Bíblico Familiar en televisión: dije en alta voz esta idea contemplativa en algún momento, pero no sé si la llegué a compartir en el blog. Por si acaso, la vuelvo a decir: sería bueno prepara un buen estudio bíblico familiar que se transmita en alguna emisora católica, ayudando a las familias a vivir con el propósito de amar más a Dios Amor y de aprender a cumplir más y más la voluntad de Dios haciendo vida la alegría de hace familia que da a luz a la Palabra, que da a luz a Jesús Caridad, que da a luz a Su pueblo-familia del nuevo albor.
–Mobile Vaccination Truck: Sería bueno tener algunos mobile vaccionation trucks que vayan directamente a comunidades a ofrecer la vacuna puerta a puerta. Acabo de ver esto en CNN —se hace en North Carolina— y no es una mala idea para implementar en Puerto Rico. Estos trucks también podrían llevarse a escuelas cuando comience el periodo escolar, y se puede incluir otro tipo de vacunas, como las de influenza.
–Una Escuela Online pk-12 gratuita (Stars Online School): esta idea creativa contemplativa es especialmente pertinente en estos tiempos de pandemia: una escuela online pk-12 que haga posible que cualquier estudiante de escuela pública que quiera optar por escuela online, pueda tener esa opción gratuitamente. Realmente esta idea creativa es una que en cierta forma le corresponde desarrollarla al Departamento de Educación, pero puede ser muy pertinente también para familias cristianas y católicas que opten por homeschooling y quieran que su hijo o hija curse estudios online desde casa. Desconozco cual es el precedente de crear una escuela católica totalmente online, pero sería un proyecto educativo muy beneficioso para Puerto Rico, especialmente para esos estudiantes que por condiciones de salud severas no puedan estudiar en la corriente regular, pero podrían estudiar de forma regular perfectamente si pudieran tener la opción de estudiar online. Esta escuela online PK-12 gratuita, si es católica cristiana, puede usarse también para diseñar clases online específicas para escuelas católicas puertorriqueñas, clases que suplementen las clases presenciales que reciben, especialmente en materia de educación en la fe y workshops de formación personal. Incluso se podría hacer un Leadership Academy online que complemente los estudios presenciales con clases de liderazgo, desarrollo personal, desarrollo vocacional y ciudadanía.
–Casa Hogar para mujeres embarazadas en situación de desamparo social: ya he tenido algunas ideas contemplativas de naturaleza pro-life (el centro nuevo albor, por ejemplo), pero me pregunto si en Puerto Rico existe algún hogar para mujeres solteras embarazadas que sencillamente necesiten el apoyo social necesario para llevar el embarazo adelante hasta culminar o en adopción del niño o en elegir criar al niño, proveyendo una casa hogar a la embarazada con todos los gastos pagos hasta el nacimiento del bebé en caso de que opte por poner en adopción al bebé, o hasta el primer año de vida del niño en caso de que opte por criar al niño ella misma. No es posible hablar de ser pro-life si no se hacen posible opciones que hagan viable que la madre diga sí a la vida de forma digna, sin que sea juzgada bajo ninguna circunstancia, ni forzada a vivir de manera indigna o en situación de desamparo social si decide decir sí a la vida.
–Pro-Puerto Rican Bussiness Promoter in Amazon: en algún anuncio en televisión vi que en Amazon vi que existe un promotor de black bussinesses (negocios cuyos dueños son empresarios de raza negra). No recuerdo exactamente como se llamaba el “título” de la persona encargada de promover black bussinesses, pero es algo cuyo sentido es equivalente a lo que escribí: businesss promoter (promotor de negocios). Sería bueno que también se coordinara un promotor de negocios puertorriqueños de Amazon, de tal forma que se promuevan que personas en la isla desempleadas desarrollen su propio negocio en Amazon, abriendo todas las vías posibles para que todo puertorriqueño se sostenga a sí mismo dignamente.
–Agencias de empleo gubernamentales mandatorias para personas que reciben ayudas gubernamentales: esta idea ya la he dicho oralmente hace mucho tiempo atrás, pero no sé si llegué a escribirla y compartirla en el blog, así que la comparto ahora. No estoy en contra de que una persona que realmente necesite ayudas gubernamentales las reciba, pero sí estoy tajante en contra de que una persona perfectamente apta para trabajar y que reciba ofertas de empleo se niegue a trabajar y aún así pueda vivir de las ayudas del gobierno. Para evitar esa situación, que en Puerto Rico ha sido terriblemente común, propongo que el Gobierno de Puerto Rico cree agencias de empleo, o haga alianzas con agencias de empleo ya existentes, de tal forma que toda persona que reciba ayudas del gobierno y que esté apto para trabajar tenga que suscribirse obligatoriamente en una agencia de empleo, que hará las gestiones para coordinar ofertas de empleo compatibles con el perfil profesional del ciudadano. Una vez el ciudadano reciba, por decir un número concreto, 5 ofertas de empleo compatibles con su perfil profesional y el ciudadano deliberadamente se niegue a aceptarlas, se le ha de suspender la ayuda de empleo al ciudadano por negarse a trabajar. No se puede tolerar lo que en buen puertorriqueño se denomina “mantengo”: personas que pudiendo trabajar optan por depender de ayudas del gobierno para mantenerse.
–Feria vocacional estatal anual con todo tipo de carreras, incluyendo carreras técnicas: Es muy normal que haya ferias de universidades y open houses para estudiantes de escuela superior. Lo que yo hablo no es algo como eso: es una feria vocacional a nivel de todo Puerto Rico, con estudiantes a partir de sexto grado o séptimo grado (a partir de middle school), que incluya información de todo tipo de carreras profesionales, no solo información de universidades, sino también de community colleges con programas técnicos, siendo una feria auténticamente vocacional, donde los estudiantes tengan una orientación de todo tipo de carreras, no solamente de las carreras universitarias. Una feria como esta debería se hecha en un lugar como el Centro de Convenciones de Puerto Rico, de tal forma que puedan asistir literalmente estudiantes de todo Puerto Rico, tanto del sistema público como del sistema privado. También debe haber orientaciones de las pruebas que sean necesarias para solicitar admisión a ciertos estudios de carreras, como la prueba del College Board. Se puede solicitar a los estudiantes que hagan un test de perfil profesional como parte de solicitar la admisión a la feria, para que se tenga información clara de los talentos e intereses profesionales del asistente y se le pueda dar información personalizada en el folder informativo que se le de al estudiante al llegar a la feria vocacional. También puede haber workshops dados por personas que trabajan en diversas profesiones. Por supuesto, también ha de haber información de todo tipo de becas y ayudas federales, como la FAFSA, que hagan accesibles los estudios post secundarios a absolutamente todo aquel que decida emprenderlo. Me parece muy oportuno que desde middle school se comience a fomentar un decidido camino profesional que haga posible que cada estudiante se convierta en un ciudadano de bien que se autosostenga con su trabajo y que aporte el mejor crecimiento profesional posible a la sociedad.
–Sistema de reciclaje municipal: El vertedero municipal de Toa Alta tiene que cerrar, aunque eso aun no haya sucedido. Propongo que en lugar de un vertedero municipal tengamos un sistema de reciclaje municipal, en el cual se tenga una planta de reciclaje municipal (supongo que incluso puede haber ayudas federales para hacer esto posible) y que toda persona del municipio que no recicle su basura, dividiéndola debidamente para que sea reciclaje, tenga que pagar por el recogido de basura. En Puerto Rico hay que fomentar una cultura de reciclaje. La isla es demasiado pequeña para manejar la basura de todos, al ritmo que vamos.
–Businness Growth Grants: ya he hablado en otros blog post de teacher grants y de classroom grants, y creo que también de community grants. Ahora hablo de growth grants: de grants concedidos a negocios o a empresarios autónomos que hagan posible un empleo digno para los empleados del negocio, o para la persona que se autoemplea. Este grant sería para ayudar a dueños de pequeñas empresas, a dueños de pequeñas oficinas de servicios profesionales de todo tipo y a personas que se autoempleen a hacer posible un empleo digno. Por ejemplo: se puede usar para comprar equipo de la empresa que haga posible un empleo más digno —esto tendría que justificarse debidamente—, se puede usar para dar talleres de crecimiento personal a empleados, se pueden dar para hacer posible que una madre cabeza de familia tenga las herramientas necesarias para tener su propio negocio de artesanías en Amazon, se puede usar para hacer posible un ambiente profesional más digno para todos los empleados —por ejemplo: remodelar o equipar la cocina de los empleados del negocio para que los empleados puedan calentar su comida debidamente—. Se trata de ayudar al empresario local a hacer posible el dar empleos dignos en su empresa.
–Teachers Summer Camp: Los maestros son una población profesional siempre necesitada de formación profesional continua, pero rara vez se les concede la oportunidad de formación profesional continua. Esta idea contemplativa creativa se trata de hacer posible un Summer Camp para maestros, que dure unas dos semanas, para que esos maestros que voluntariamente quieran recibir formación profesional continua durante verano puedan darla. Eso puede ser financiado parcialmente por compañías publicadoras de libros escolares a las que les interesaría promoverse entre maestros. En este summer camp se debe dar estipendios dependiendo de la localización del maestro, de tal forma que se pueda hacer posible que maestros de todo lugar puedan asistir sin que sea un costo a su bolsillo. También debe haber cuido de niños disponible para los casos a los que aplique. Estoy muy segura de que muchísimos maestros en Puerto Rico estarían más que gustosos de poder ir a un summer camp diseñado especialmente para ellos.
–Family Boxes: sabemos que hay familias numerosas —familias de más de tres hijos menores de edad o dependientes universitarios— que son familias con más vulnerabilidad social. Se podría diseñar para estas familias una family box que mensualmente envíe a esas familias por correo productos que sobren a empresas, o que empresas quieran donar o promover, productos especialmente enfocados en familias numerosas y que se sabe que son utilizados habitualmente por este perfil de familias. Incluso, con la suficiente coordinación, se podrían enviar productos frescos y alimentos como viandas, frutas y vegetales. Si se tiene el perfil de las edades de los niños incluso se podrían enviar juguetes y libros que estén age-targeted.
–Acuerdo bilateral inter-estatal de acceso a estudios post-secundarios a precio de estudiante in-state entre los estados de Florida y Puerto Rico: Aunque esta noción sea habitualmente desconocida entre estudiantes puertorriqueños, las universidades suelen tener un precio para estudiantes del propio estado (estudiante in-state) y para estudiantes de estados diferentes (out-state state). Encomio a las universidades del estado de la Florida y a las universidades de Puerto Rico, al menos las respectivas universidades públicas, para que creen un acuerdo interestatal que haga posible que estudiantes de ambos estados puedan estudiar a precio de in-state students en ambos estados. Quiero decir: que estudiantes universitarios puertorriqueños que vayan a estudiar a Florida puedan estudiar a precio de estudiante in-state y que estudiantes de Florida que vengan a estudiar a Puerto Rico lo hagan a precio de estudiante in-state. Esto no solo promovería una sana integración inter-estatal, sino que también haría más fácil el acceso de estudiantes puertorriqueños —que no están acostumbrados a pagar lo que se paga en Florida por estudios universitarios— a carreras que no pueden estudiarse en Puerto Rico, como veterinaria. Cualquier otro estado que quiera hacer un acuerdo semejante, como el de New York, sería más que ideal, de tal forma que se haga posible que haya estudios post-secundarios accesible para todo puertorriqueño, pero pienso es especialmente importante que exista un acuerdo como este entre las universidades de Puerto Rico y del estado de Florida, el estado más próximo territorial y culturalmente a Puerto Rico. Por supuesto, para que un estudiante puertorriqueño estudie en Florida se le debe requerir la debida prueba de que habla inglés (algo como la prueba TOEFL) y para que un estudiante de Florida estudie en Puerto Rico se le debe requerir el debido dominio en español (no sé de una prueba equivalente al TOEFL en el idioma español, pero debe haberla).
–abrir en AMSCCA un programa gratuito para dejar de fumar: el Gobierno debe alentar a dejar de fumar abriendo un programa de teleconsulta donde haya mentores para ayudar a dejar de fumar, brindándole gratuitamente a los participantes al menos 1 mes de suministros de parches de nicotina o de cualquier ayuda disponible para dejar de fumar, incluyendo no solo parchos de nicotina sino también libros motivacionales o incluso de diseñar un “new life journal” donde los participantes vayan anotando los cambios positivos que repercute en su salud y de su familia el dejar de fumar. Conozco de estados que brinda ayuda gratuita para dejar de fumar por dos semanas. Aspiremos a un mes, que es un periodo mas razonable. Un programa de seis meses sería lo ideal. La nicotina es una adicción como cualquier otra que requiere ayuda profesional para superarla, no es mera “fuerza de voluntad”. Se debe brindar ayuda gratuita a las personas que quieran dejar ese vicio.
Hasta aquí la lista de ideas creativas contemplativas de este blog post, que planifico compartir en cuanto encuentre internet para conectarme (esta vez no la buscaré en San Juan, esta vez buscaré internet en Bayamón, aunque no sepa donde esté la biblioteca municipal la encontraré, tiene que haberla) al salir el 21 de julio.
He escuchado por la radio —esa es mi forma de enterarme de noticias sin tener que salir del cuarto— que el Departamento de la Vivienda comenzó a brindar una ayuda para ciudadanos que tengan el alquiler atrasado y el pago de utilidades básicas atrasadas debido a la pandemia. Esa ayuda me parece muy digna y muy necesaria en estas circunstancias y felicito al que tuvo la iniciativa para darla. Las cosas que se hacen bien también hay que reconocerlas. Esta es una medida de gran sensibilidad social y humana en estas circunstancias.
También escuché por radio un acertado análisis social del cual me gustaría hacerme eco aquí. El analista de noticias Julio Rivera Saniel —perdón si lo escribí mal— comentó, parafraseando un poco, que en Puerto Rico están surgiendo todo tipo de iniciativas en respuesta a la crisis de violencia de género, pero cuando ocurre una masacre en la que mueren jóvenes varones por narcotráfico, tal cual pasó en Fajardo el 20 de julio, no surgen medidas para atajar la violencia que asesina a jóvenes varones de forma tan atroz, como si nos hubiéramos acostumbrado a que cada unos cuantos días muera otro joven varón más debido al narcotráfico. Al combatir la violencia hay que combatir absolutamente todo tipo de violencia, comentó el locutor de radio, y creo que tiene razón. Por eso siempre he estado en contra de que se declare un estado de emergencia por violencia de género: se tiene que declarar un estado de emergencia por violencia civil, ante TODO tipo de violencia que está asolando en estos momentos a Puerto Rico. No lo digo solo por la violencia psicológica y social y el odio que arrecia a mi alrededor. Lo digo por lo mismo que comenta Julio Rivera Saniel: se tiene que actuar ante TODO tipo de violencia que está arreciando en estos momentos en Puerto Rico. Como dije al principio de este blog, pienso que la raíz de este tipo de problema social en Puerto Rico es, en su causa más profunda, la falta de empleo digno que empuja a forma de vidas indignas y hasta delictivas. Nos corresponde hacer posible un cambio… irradiando juntos luz hasta hacer posible un Puerto Rico donde todos resplandezcamos como hermanos.
Otra cosa de la que me enteré escuchando radio es de un evento que harán el próximo 25 en el Jardín Botánico de Caguas, una actividad familiar llamada “El Picnic” donde se podrá disfrutar de un buen día de actividades artísticas y culturales que puede disfrutar toda la familia, promoviendo además el uso eficiente de recursos al usar el menos plástico posible. ¡Mi enhorabuena a quienes diseñaron y llevaron adelante esa actividad! Es una gran forma de irradiar luz a la sociedad puertorriqueña.
Acabo de prepararme un resumé extremadamente sencillo para ir a una feria de empleo en el Centro de Convenciones tras compartir este blog post y usar un rato el internet. Probablemente primero pase por el Departamento de Educación en Bayamón a ver si aún hay vacantes para maestras de inglés. ¡Recen por esta servidora!
Pensaba compartir este blog post en la “Biblioteca Municipal de Bayamón” pero resulta que no hay biblioteca municipal ni siquiera en Bayamón… Intenté una vez más ir a la Biblioteca Lázaro de la UPR de Río Piedras a usar internet pero tampoco se pudo, como la última vez… De camino a la otra opción posible para usar internet, la Casa Dominicana, quise parar en Popeyes de Sagrado Corazón para comprar almuerzo, y aunque no pude comer en Popeyes porque estaba demasiado lleno, vi una librería pequeña en la estación Sagrado Corazón y resulta que encontré internet allí… y aquí estoy. Es una librería pequeña en la estación de tren Sagrado Corazón con buen café y empleados muy amables. Hasta me ofrecieron una solicitud de empleo cuando me vieron imprimiendo resumés. He estado un buen rato en una esquina, usando Facebook y Twitter (creo que no usaba redes sociales desde hace tres semanas, en Casa Dominicana puedes usar internet pero sin poder usar ningún tipo de red social) y hasta encontré un enchufe. Hace falta más negocios así en Puerto Rico. En la mañana pasé por la oficina del Departamento de Educación en Bayamón para ver si había vacantes de maestros de inglés, pero sencillamente se me respondió con una respuesta puramente burocrática. Sencillamente es tremendamente desalentante tratar con el Departamento de Educación…. pero seguiré intentando encontrar un empleo compatible con mis circunstancias. Creo firmemente en que todo puertorriqueño que quiera salir honradamente adelante podrá encontrar las oportunidades para ello si está dispuesto a trabajar duro y si está dispuesto a elegir irradiar luz. Eso es lo que hago en estos momentos, elegir irradiar luz una y otra vez, elegir no responder odio con odio una y otra vez, elegir hacer el Amor una y otra vez , eligiendo hacer la paz una y otra vez, eligiendo construir un Puerto Rico vivo y un Estados Unidos vivo una y otra vez, eligiendo una y otra vez hacer resplandecer la esperanza para todos, eligiendo una y otra vez irradiar la nueva vida que da el Amor, que da Jesús Caridad, haciendo posible que todos resplandezcamos como Patria Luz, como Patria familia…
¡Hay tantas opciones en nuestro día a día para elegir construir la Patria luz que somos llamados a ser! Comencemos en lo cotidiano y simple del día a día. Tendamos la mano. Ayudemos a crecer a todos. Elijamos perdonar. Elijamos construir juntos una sociedad más fraterna y unida para todos. Elijamos caminar juntos. Elijamos crecer juntos. Elijamos irradiar luz juntos. Para quienes somos cristianos, elijamos hacer vida Su visión, elijamos dar más y más testimonio de como el encuentro personal con Dios Amor transforma nuestras vidas una y otra vez en historia de Amor que no podemos dejar de compartir haciendo más y más visible Su Amor vivo y encarnado, eligiendo una y otra vez vivir la caridad, eligiendo una y otra vez vivir el poder de la luz, eligiendo una y otra vez irradiar más y más la luz de Su mirada, de Su Corazón. Todos somos llamados a hacer una diferencia única en nuestra sociedad, haciendo posible que todos resplandezcamos como los hermanos que somos llamados a ser, resplandeciendo juntos en más y más comunión, en más y más comunión…
¡Sigamos eligiendo irradiar más y más luz, haciendo más y más posible un Puerto Rico luz, un Estados Unidos luz, donde todos puedan crecer como la Patria familia que somos llamados a ser!